20120429

Texto del Domingo 29 de abril de 2012

Estoy con ustedes todos los días hasta la conclusión 
del sistema de cosas (Mat. 28:20).
Durante su ministerio, Jesús siempre encabezó la predicación, y después de su resurrección supervisó directamente la difusión de las buenas nuevas. Valiéndose del espíritu santo, Jesús se encargaría de que la predicación fuera extendiéndose hasta abarcar todo el planeta. Por eso, antes de ascender al cielo, les aseguró a sus discípulos: “Recibirán poder cuando el espíritu santo llegue sobre ustedes, y serán testigos de mí tanto en Jerusalén como en toda Judea, y en Samaria, y hasta la parte más distante de la tierra” (Hech. 1:81 Ped. 1:12). Ciertamente, en el siglo primero se dio un gran testimonio bajo su dirección (Col. 1:23). No obstante, el propio Jesús señaló que dicha obra continuaría hasta el tiempo del fin, como lo muestran las palabras del texto de hoy. Desde que recibió el trono en 1914, Cristo está con sus discípulos más que nunca, actuando como su Líder. w1015/9 4:14-16