[Echen] sobre [Dios] toda su inquietud (1 Ped. 5:7).
E
l bautismo es un paso trascendental en la vida. No debe tomarse a la ligera. Joven, ¿tienes la madurez necesaria para plantearte esa decisión? Ser maduro es mucho más que presentar buenas asignaciones en la plataforma o impresionar a los hermanos con tus comentarios en las reuniones. Implica saber tomar decisiones basadas en los principios bíblicos (Heb. 5:14). Si ya has alcanzado el desarrollo espiritual que te permitirá bautizarte, tienes ante ti el mayor privilegio que existe: servir a Jehová de todo corazón, demostrando día a día con tu conducta que vives dedicado a él. Seguramente, después de bautizarte estarás muy entusiasmado con tu servicio a Dios. Pero enseguida vendrán situaciones que pondrán a prueba tu fe y tu aguante (2 Tim. 3:12). No pienses que tienes que enfrentarte a ellas solo. Jehová te ama y te dará fuerzas para que puedas resistir lo que venga. w10 15/11 3:16, 17